¿Alguna vez te has preguntado por qué los colores de tus documentos impresos no son exactamente los mismos que los que ves en tu pantalla? La respuesta está en la impresión digital y el formato para imprimir que hayas elegido.

Al diseñar, especialmente para medios digitales, es común trabajar en RGB debido a su amplia gama de colores y, a la hora de imprimir el archivo, convertirlo a CMYK para ajustar cada color. Pero, gracias a las últimas innovaciones tecnológicas, ¡ahora también se puede imprimir en RGB!

Entonces, ¿es mejor CMYK o RGB para imprimir? Depende del resultado que estés buscando, por supuesto. En cualquier caso, en este post vamos a tratar de guiarte en esa decisión.

Diferencias entre CMYK y RGB

Como ya te contamos en nuestro artículo sobre la teoría del color, hay dos hipótesis fundamentales a la hora de explicar cómo se generan los colores, la síntesis aditiva y la sustractiva. Cada una defiende un modelo de color diferente: RGB o CMYK.

La paleta de colores que forma cada modelo es la principal diferencia entre CMYK y RGB, aunque podemos hablarte de muchas más. Para que puedas entenderlas bien, vamos a analizarlos primero por separado:

¿Qué es el CMYK?

Por un lado, las siglas CMYK hacen referencia a los colores de este modelo: Cyan, Magenta, Yellow y Key (para designar al Black). Un modelo que, por cierto, es el estándar en la industria de la impresión.

El CMYK se basa en la combinación de estas cuatro tintas para generar, a partir de ellas, una amplia variedad de colores. Cada tinta absorbe ciertas longitudes de onda de luz y refleja otras, creando así el color que vemos en el papel.

¿Cuáles son las ventajas del CMYK para imprimir?

  • Los colores se reproducen con mayor precisión.
  • Se usa menos tinta que con otros modelos.
  • Es adecuado para una variedad de materiales de impresión.

Habitualmente, hacemos uso de los colores CMYK para imprimir folletos, catálogos, revistas, carteles, pancartas e incluso etiquetas, cajas y envases.

cmyk para imprimir

¿Qué es el RGB?

En cuanto al RGB, se llama así con relación a los colores primarios Red, Green y Blue, y es el modelo de color más usado en dispositivos digitales. Funciona mediante la combinación de esos tres colores en distintas intensidades de luz para crear una extensa gama de tonalidades.

¿Los principales beneficios del formato RGB?

  • Puede generar alrededor de 17 millones de colores diferentes.
  • Los colores en RGB tienden a ser más intensos y brillantes.

Entre las aplicaciones más comunes del RGB, está el diseño web, la fotografía digital, el diseño gráfico o los videojuegos.

Cómo imprimir en CMYK

Como comentábamos, el formato para imprimir por excelencia es CMYK.

En Omán Impresores siempre seguimos estos pasos para asegurar la calidad del resultado final a la hora de imprimir en CMYK:

  • Usamos el programa adecuado para convertir el archivo a CMYK y ajustar los colores a este espectro.
  • Ajustamos los perfiles de color para que coincidan con los que usa nuestra impresora.
  • Realizamos pruebas para verificar cómo se verán los colores en el papel, algo crucial en el caso de grandes tiradas porque puede evitar errores costosos.
  • Nos aseguramos previamente de que los colores que has seleccionado son aptos para impresión.

¡Por cierto! Te recomendamos echar un vistazo a nuestro artículo sobre los colores de moda en el mundo de la impresión este 2024. ¡Al menos si quieres adaptar tus proyectos a las tendencias del momento!

Cómo imprimir en RGB

¿Y qué hay de imprimir en RGB? Sí, es mucho menos común, ¡pero no imposible! Solo hacen falta las herramientas adecuadas, ¡y en Omán contamos con ellas!

Nuestra imprenta pone a tu disposición una maquinaria que permite simular el espacio de color sRGB, una solución de impresión digital cuanto menos innovadora.

Al igual que con CMYK, cuando imprimimos en RGB nos encargamos de verificar cómo se verán los colores una vez impresos y realizamos las pruebas y ajustes que sean necesarios para un acabado de impresión impecable. ¡Por algo nos llaman la imprenta de los maniáticos y perfeccionistas!

 

Ahora que ya has entendido las diferencias entre CMYK o RGB para imprimir, solo tienes que aplicar el formato adecuado y conseguirás resultados profesionales con una calidad de impresión superior.

Si quieres un poco de ayuda y prefieres ahorrarte disgustos, déjalo en manos de una imprenta de confianza. Una que sea capaz de ajustarse a tus requisitos de color y a cualquier otra especificación… ¿Qué te parece Omán Impresores?